Sobre los orígenes del COVID19
La enfermedad de la que todos hablamos, desde la primavera del año 2020 (aunque su presentación en sociedad, fue en diciembre de 2019 en Wuhan, (capital de la provincia de Hùbei, en la China central) y se repite de conversación en conversación, recibe muchos nombres como CORONAVIRUS, CORONAVIROSIS, CORONAVIRUS HUMANO, COVID19 (COronaVIrus Disease 19) respondiendo a sus siglas en inglés y al año de aparición, o a su denominación científica estandarizada para todos los laboratorios e investigadores del mundo: SARS-CoV-2.
Genéticamente es un virus muy similar a un virus aislado de la especie de murciélagos Rhinopholus, pero de momento no existe una evidencia clara que relacione a esta variedad de murciélago con el origen de la pandemia de coronavirus en el ser humano.
La importancia de una vacuna al SARS-CoV-2 para los humanos
Serán necesarios más trabajos de investigación que puedan dar forma a esta parte de la cadena epidemiológica, aunque en este momento la mayoría de los esfuerzos de investigación están orientados al conocimiento del agente etiológico y su interacción con el ser humano, así como al desarrollo de una vacuna que permita estimular las defensas necesarias para que la mayor parte de la población, independientemente del grupo de edad al que pertenezca, pueda hacer frente a los estragos de la infección.
La rápida difusión del virus, su alta variabilidad de impacto en el organismo hospedador y su alto índice de mortalidad han transformado al COVID19 en un serio desafío para la sociedad en su conjunto.
La OIE (Organización Internacional de Sanidad Animal) informa que el SARS-COV-2 es un virus que se mantiene por la transmisión entre humanos. No mencionan a día de hoy, ninguna otra especie animal como parte de la cadena de transmisión.
Los animales no presentan un especial peligro frente al coronavirus
Esta especificidad de especie, en la actualidad, nos permite poder asegurar que no es necesario adoptar medidas de control excepcionales, con los animales domésticos, más allá de las que siempre se recomiendan para evitar la transmisión de zoonosis entre animales de compañía y el ser humano.
Se ha demostrado la susceptibilidad de ciertas especies animales a la infección por SARS-CoV-2 ya se sea de manera natural o por infección experimental. Estudios experimentales han demostrado que importantes especies de producción (aves de corral y cerdos) no son susceptibles a la infección por SARS-CoV-2. Se requieren estudios suplementarios para comprender si y cómo diferentes animales pueden ser afectados por SARS-CoV-2.
Resulta esencial efectuar el seguimiento de las infecciones en animales con el fin de comprender mejor su importancia epidemiológica en términos de sanidad animal, biodiversidad y salud humana. La evidencia derivada de las evaluaciones de riesgo, de investigaciones epidemiológicas y de estudios experimentales no sugieren que los animales vivos o los productos de animales tengan un papel en la infección por SARS-CoV-2 en el hombre.
Conclusiones del laboratorio líder en diagnóstico de enfermedades infecciosas
Según trabajos sobre más de 5000 muestras, y varios ensayos experimentales el laboratorio Idexx, líder en diagnóstico de enfermedades infecciosas en todo el mundo, afirma que:
- Actualmente no hay ningún indicio de que los perros o los gatos transmitan la enfermedad a los humanos. Y no hay indicios de que los perros fueran el origen del SARS-CoV-2, la cepa de coronavirus responsable del brote de la enfermedad respiratoria por coronavirus 2019 (COVID-19) en humanos.
- Las principales autoridades de salud pública (como la AVMA, el CDC, y la OIE) reconocen que la COVID-19 es principalmente una enfermedad humana que se propaga a través de la transmisión directa de humano a humano por gotitas respiratorias.
- Desde mediados de febrero, los laboratorios de referencia de IDEXX han realizado pruebas de detección del virus de COVID-19 en más de 5000 especímenes de gatos, perros y caballos con síntomas respiratorios en 17 países. Hasta la fecha, IDEXX no ha encontrado resultados positivos. Esto sugiere que los perros y gatos generalmente permanecen no infectados, excepto en casos raros y aislados.
- Las investigaciones y la información actual indican que las infecciones pasajeras en mascotas, particularmente en gatos y hurones, pueden tener niveles variados de susceptibilidad. Los estudios sobre infecciones experimentales han demostrado que los perros generalmente son resistentes a la infección.
Recursos
Veterinarios ante el COVID 19. Consejos Generales
Ficha Técnica de la Enfermedad. Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE)
COVID 19 y Animales. Colegio Veterinario de Madrid y Universidad Complutense de Madrid
10 cosas que está haciendo la UE en relación a la pandemia COVID 19.